Comunicado de Prensa para publicación inmediata
San Juan, Puerto Rico, jueves, 7 de julio de 2011- En la mañana de hoy la Alianza Multisectorial por el Desarrollo Económico Comunitario (AMDEC) presentó ante el país el Fondo Comunitario Puertorriqueño (FCP), el primer fondo de esta índole creado en la Isla. El mismo es un fondo para micropréstamos gestado desde las organizaciones e integrantes de dicha alianza.
Según explicó la presidenta de AMDEC y directora ejecutiva de Proyecto Matria, Lcda. Amárilis Pagán Jiménez, la situación económica del país y el creciente número de personas sin acceso a empleos o capital de inversión han creado una necesidad imperiosa de trabajar el tema del desarrollo económico comunitario desde una perspectiva amplia y de confianza en el potencial de las empresas comunitarias.
“Tan cercano como el pasado mes de junio, tuvimos la oportunidad de escuchar al Centro para la Nueva Economía hablar sobre el estado económico de la Isla y los datos que nos ofrecieron fueron devastadores. Actualmente, Puerto Rico necesita crear casi 800mil nuevos empleos para contrarrestar la recesión económica en la que nos encontramos y la realidad es que ni el gobierno, ni el sector privado tradicional tienen la capacidad de generarlos. De hecho, en los últimos cinco años esos sectores han reducido 239mil empleos. ¿Qué nos toca hacer al resto del país? ¿Esperar pasivamente a que alguien decida por nosotros o asumir el liderazgo económico y recurrir a estrategias no tradicionales? Las organizaciones y entidades que componen AMDEC elegimos las estrategias no tradicionales y de ahí es que surgió el Fondo Comunitario Puertorriqueño”, señaló Pagán.
El objetivo del FCP es crear un fondo de capital que se nutrirá con donativos provenientes de ciudadanos y ciudadanas de la Isla y de inversiones de otras fuentes. El dinero recaudado se depositará en organizaciones comunitarias que tendrán a su cargo la creación de productos prestatarios para micro empresarias y empresarios que debido a sus bajos ingresos e historial de crédito no tienen la oportunidad de solicitar préstamos tradicionales.
Vannessa Piñeiro Montes, tesorera de AMDEC y oficinal de reinversión comunitaria de Banco Popular de PR, expresó que las entidades financieras que integran AMDEC creen en la importancia de brindar este tipo de oportunidad a sectores económicos como el de mujeres jefas de familia, residentes de comunidades de muy bajos ingresos y otros sectores económicamente vulnerables. “Estamos conscientes de que a pesar de los esfuerzos de la banca para crear productos bancarios para estas poblaciones, no hemos logrado llegar a todas las personas que necesitan capital semilla para iniciar una empresa o autoemplearse. A través del FCP esperamos crear ese espacio tan necesario”, añadió.
Como parte de su estrategia de capitalización, AMDEC creó una página web (www.amdecpr.org) en la cual las personas interesadas podrán obtener más información del FCP, hacer sus donaciones, ver historias de éxito de empresarias y empresarios comunitarios y seguir las estadísticas económicas relacionadas con el fondo que comenzarán a publicarse tan pronto el mismo comience a operar a capacidad.
El FCP contará, además, con una plataforma tecnológica adquirida por AMDEC, Proyecto Matria, Comerciantes Unidos por el Desarrollo Comunitario de Camuy, Proyecto PECES y Ceiba Housing. La misma permite que tanto las organizaciones participantes del FCP como AMDEC manejen todas las fases de otorgación de un préstamo, así como el seguimiento de estadísticas, cobro y todos los procesos necesarios para la administración saludable de sus respectivos programas de microcréditos.
“Con el FCP estamos dando un paso gigantesco hacia el apoderamiento económico de nuestras organizaciones, de nuestras comunidades y de cada persona que servimos. Demostraremos que como país somos capaces de gestionar soluciones a nuestros problemas y que además, la solidaridad de los sectores para los cuales trabajamos y del resto de las comunidades es capaz de levantar un fondo de capital que alimente los sueños y la prosperidad de las nuevas empresarias y empresarios que quieren ser parte de la reconstrucción de nuestro país”, concluyó Pagán.
7 de julio de 2011
6 de julio de 2011
Organizaciones se unen para demostrar que otra economía sí es posible
Nota publicada en Prensa Comunitaria:
Martes, 21 de Junio de 2011 14:57 Naisha Yaney Feliciano Moragón
http://www.prensacomunitaria.com/pobreza-y-desigualdad/desarrollo-economico-comunitario/858-organizaciones-se-unen-para-demostrar-que-otra-economia-si-es-posible#
Entre los tapones, las preocupaciones, la politiquería y el día a día al que nos enfrentamos en Puerto Rico se abrió un espacio donde estaba permitido soñar con una economía más a tono con las necesidades comunitarias de la isla.
El Segundo Coloquio de Desarrollo Económico Comunitario, convocado por el Proyecto Matria, contó con la presencia de economistas y organizaciones comunitarias. También tuvo presencia de un nutrido público que conversaba sobre sus respectivas organizaciones. El C3Tec de Caguas se convirtió en un lugar donde se podían ver ejemplos de economías alternativas para subsistir en el capitalismo.
Ese mismo día se celebraba la Convención de Industriales en El Conquistador. Pero en Caguas el ambiente reflejaba ánimos positivos, desde arreglar problemas hasta buscar nuevas alternativas para los que menos tienen. El Municipio de Caguas, representado por Carmen Muñoz, hablaba de salvación. Su delegada no dudó en decir: “La salvación de la economía puertorriqueña está en las microempresas”.
Algo por ahí se ha escuchad sobre el Desarrollo Económico Comunitario, la Economía Solidaria y el Cooperativismo, sin embargo, en pocas ocasiones sabemos de sus “instrucciones de uso”. El desarrollo económico comunitario es considerado una de las propuestas más efectivas para erradicar la pobreza y la exclusión social. Nelson Reyes del Valle, de ConsultCom, en su ponencia ¿Qué es el Desarrollo Económico Comunitario? sostiene que es un modelo económico, cuya naturaleza radica en la generación de soluciones a los problemas socio-económicos por parte de la misma comunidad que los padece De esta manera se puede “crear una comunidad con la capacidad de integrar metas económicas, sociales y ambientales”.
El desarrollo económico comunitario es totalmente opuesto a las estructuras económicas tradicionales porque el individuo es la cualidad más importante de la economía. El sistema le da importancia primordial al ser humano y ve el desarrollo económico de una persona como un instrumento para que la persona se desarrolle en otras áreas, y no como un fin en sí mismo. El modelo económico (desarrollo económico comunitario) busca incluir a aquellos que han sido excluidos de los sistemas de producción modernos. Las ganancias de este tipo de empresas son para los trabajadores. En resumidas cuentas, el modelo se enfoca más en procesos, que en resultados. De acuerdo con Reyes, funciona porque parte desde la organización comunitaria y sus recursos humanos, ambientales y financieros, y los pone a trabajar para ellos mismos.
Ante este concepto, es meritorio preguntarse con cuáles recursos contamos en nuestra isla para poder implantar el modelo. El Dr. Sergio Marxuach, Director de Política Pública del Centro para la Nueva Economía, presentó el Perfil de la Economía de Puerto Rico.
Tras su análisis, Marxuach opinó: “Nuestras instituciones económicas, sociales, y políticas están podridas y derrumbándose: nuestro sistema socioeconómico está visiblemente llegando a su final; y todo el mundo lo sabe, pero nadie habla de ello.”
A los retos que enfrenta la economía, se suma el cambio poblacional. De acuerdo con Marxuach, es la primera vez, desde que se efectúa el Censo, que se registra una merma en la población. Esta baja poblacional se debe a dos factores principales: el descenso de la natalidad y la migración, principalmente a los Estados Unidos. Ejemplo de esto es que en el 2007, ocho de cada 1,000 residentes en la isla habían emigrado. El bajo nivel de natalidad también es un factor de importancia. De acuerdo con Marxuach, la natalidad recomendada es de 2.1% niño por familia, no obstante de acuerdo con el último Censo, la tasa de natalidad en Puerto Rico es de 1.70%. Este cambio podría traer consecuencias negativas en las áreas de pensiones y salud, así como en el cuidado de la población envejeciente. A esto se suma que la mayor cantidad de dependientes (menores de 15 y mayores de 64) sobrepasan los 64 años de edad.
El 73% de los puertorriqueños está en edad productiva, pero de éstos, sólo un 33.7% trabaja en la economía formal –que excluye a aquellos que, aunque trabajen, no lo hacen de forma oficial. De acuerdo con el Dr. Marxuach la desigualdad de ingreso, más que la pobreza extrema, redunda en problemas de salud y sociales como el uso de drogas.
Amarilis Pagán, fundadora y directora de la organización feminista Proyecto Matria, completó el panorama del Coloquio de Desarrollo Económico Comunitario al hablar de la importancia de tener un sistema que haga más que producir productos de consumo y que los problemas financieros no son los únicos que la economía solidaria puede aliviar.
Amarilis Pagán descubrió el desarrollo Económico Comunitario cuando se dio cuenta de que a las mujeres sobrevivientes de violencia doméstica les hacía falta más que un lugar donde refugiarse. Hoy no se arrepiente de haberse abanderado con las comunidades y expresa que el trabajo digno no está en las grandes empresas, cadenas de “fastfoods” o megatiendas, sino en las comunidades y las empresas solidarias.
Pagán estuvo a cargo de la ponencia titulada Equidad Económica y Derechos Humanos. La estrecha relación entre estos dos ámbitos se clarificó cuando la feminista explicó que para que exista una democracia real y los individuos sean capaces de reclamar sus derechos , es necesaria una distribución equitativa de los recursos. En este sentido, dio como ejemplo que una persona cuya preocupación esencial es qué comerán sus hijos, no estará activa políticamente porque su energía estará concentrada en preocupaciones más obvias e inmediatas.
No es sorprendente que el tema de la pobreza sea uno tan importante para alguien que vela por los derechos de las mujeres. Y es que la autonomía económica, el nivel educativo, la igualdad económica entre géneros y la oportunidad de progreso son algunos de los factores de protección de las mujeres, según la Organización Mundial de la Salud. Como consecuencia, la falta de estos elementos genera vulnerabilidad en las mujeres. Ante esto, Pagán expresó: “En la medida en que una trate de resolver ciertos problemas sociales solamente mirando los problemas psicosociales, por ejemplo, pues estamos dejando todo un componente que sabemos que tiene que estar presente, que es el económico. Podemos tener 50 albergues en la isla… pero sino desarrollamos económicamente a las mujeres vamos a necesitar 100”.
El perfil de las mujeres que utilizan los servicios de Matria corresponde al de las comunidades en desventaja de Puerto Rico. Su nivel educativo máximo es un diploma de escuela superior. Lo anterior se observa en los rezagos y la dificultad en escritura, lenguaje y matemática. Tampoco tienen acceso a servicios eficientes de educación, salud, y de tipo legal. En muchos casos tienen mal crédito, y no tienen capital propio, como vehículos y propiedades.
Es por ello que la directora de Matria quiso proponer un cambio, partiendo de los conceptos de economía y derechos humanos. Primeramente, sugirió cambiar el rol de consumidores que no producen sus bienes, ya que este patrón crea desigualdad y vulnerabilidad ante aquellos que manejan la producción. Dijo Pagán que una economía de desarrollo económico comunitario implica libertad y liderazgo.
La merienda sirvió de excusa perfecta para que micro-empresarias desarrolladas por Matria compartieran y mostraran sus deliciosos productos. Vimos cómo se puede salir adelante con ímpetu y solidaridad, comercializando un producto exquisito hecho por manos locales, como los deliciosos bizcochos.
Martes, 21 de Junio de 2011 14:57 Naisha Yaney Feliciano Moragón
http://www.prensacomunitaria.com/pobreza-y-desigualdad/desarrollo-economico-comunitario/858-organizaciones-se-unen-para-demostrar-que-otra-economia-si-es-posible#
Entre los tapones, las preocupaciones, la politiquería y el día a día al que nos enfrentamos en Puerto Rico se abrió un espacio donde estaba permitido soñar con una economía más a tono con las necesidades comunitarias de la isla.
El Segundo Coloquio de Desarrollo Económico Comunitario, convocado por el Proyecto Matria, contó con la presencia de economistas y organizaciones comunitarias. También tuvo presencia de un nutrido público que conversaba sobre sus respectivas organizaciones. El C3Tec de Caguas se convirtió en un lugar donde se podían ver ejemplos de economías alternativas para subsistir en el capitalismo.
Ese mismo día se celebraba la Convención de Industriales en El Conquistador. Pero en Caguas el ambiente reflejaba ánimos positivos, desde arreglar problemas hasta buscar nuevas alternativas para los que menos tienen. El Municipio de Caguas, representado por Carmen Muñoz, hablaba de salvación. Su delegada no dudó en decir: “La salvación de la economía puertorriqueña está en las microempresas”.
Algo por ahí se ha escuchad sobre el Desarrollo Económico Comunitario, la Economía Solidaria y el Cooperativismo, sin embargo, en pocas ocasiones sabemos de sus “instrucciones de uso”. El desarrollo económico comunitario es considerado una de las propuestas más efectivas para erradicar la pobreza y la exclusión social. Nelson Reyes del Valle, de ConsultCom, en su ponencia ¿Qué es el Desarrollo Económico Comunitario? sostiene que es un modelo económico, cuya naturaleza radica en la generación de soluciones a los problemas socio-económicos por parte de la misma comunidad que los padece De esta manera se puede “crear una comunidad con la capacidad de integrar metas económicas, sociales y ambientales”.
El desarrollo económico comunitario es totalmente opuesto a las estructuras económicas tradicionales porque el individuo es la cualidad más importante de la economía. El sistema le da importancia primordial al ser humano y ve el desarrollo económico de una persona como un instrumento para que la persona se desarrolle en otras áreas, y no como un fin en sí mismo. El modelo económico (desarrollo económico comunitario) busca incluir a aquellos que han sido excluidos de los sistemas de producción modernos. Las ganancias de este tipo de empresas son para los trabajadores. En resumidas cuentas, el modelo se enfoca más en procesos, que en resultados. De acuerdo con Reyes, funciona porque parte desde la organización comunitaria y sus recursos humanos, ambientales y financieros, y los pone a trabajar para ellos mismos.
Ante este concepto, es meritorio preguntarse con cuáles recursos contamos en nuestra isla para poder implantar el modelo. El Dr. Sergio Marxuach, Director de Política Pública del Centro para la Nueva Economía, presentó el Perfil de la Economía de Puerto Rico.
Tras su análisis, Marxuach opinó: “Nuestras instituciones económicas, sociales, y políticas están podridas y derrumbándose: nuestro sistema socioeconómico está visiblemente llegando a su final; y todo el mundo lo sabe, pero nadie habla de ello.”
A los retos que enfrenta la economía, se suma el cambio poblacional. De acuerdo con Marxuach, es la primera vez, desde que se efectúa el Censo, que se registra una merma en la población. Esta baja poblacional se debe a dos factores principales: el descenso de la natalidad y la migración, principalmente a los Estados Unidos. Ejemplo de esto es que en el 2007, ocho de cada 1,000 residentes en la isla habían emigrado. El bajo nivel de natalidad también es un factor de importancia. De acuerdo con Marxuach, la natalidad recomendada es de 2.1% niño por familia, no obstante de acuerdo con el último Censo, la tasa de natalidad en Puerto Rico es de 1.70%. Este cambio podría traer consecuencias negativas en las áreas de pensiones y salud, así como en el cuidado de la población envejeciente. A esto se suma que la mayor cantidad de dependientes (menores de 15 y mayores de 64) sobrepasan los 64 años de edad.
El 73% de los puertorriqueños está en edad productiva, pero de éstos, sólo un 33.7% trabaja en la economía formal –que excluye a aquellos que, aunque trabajen, no lo hacen de forma oficial. De acuerdo con el Dr. Marxuach la desigualdad de ingreso, más que la pobreza extrema, redunda en problemas de salud y sociales como el uso de drogas.
Amarilis Pagán, fundadora y directora de la organización feminista Proyecto Matria, completó el panorama del Coloquio de Desarrollo Económico Comunitario al hablar de la importancia de tener un sistema que haga más que producir productos de consumo y que los problemas financieros no son los únicos que la economía solidaria puede aliviar.
Amarilis Pagán descubrió el desarrollo Económico Comunitario cuando se dio cuenta de que a las mujeres sobrevivientes de violencia doméstica les hacía falta más que un lugar donde refugiarse. Hoy no se arrepiente de haberse abanderado con las comunidades y expresa que el trabajo digno no está en las grandes empresas, cadenas de “fastfoods” o megatiendas, sino en las comunidades y las empresas solidarias.
Pagán estuvo a cargo de la ponencia titulada Equidad Económica y Derechos Humanos. La estrecha relación entre estos dos ámbitos se clarificó cuando la feminista explicó que para que exista una democracia real y los individuos sean capaces de reclamar sus derechos , es necesaria una distribución equitativa de los recursos. En este sentido, dio como ejemplo que una persona cuya preocupación esencial es qué comerán sus hijos, no estará activa políticamente porque su energía estará concentrada en preocupaciones más obvias e inmediatas.
No es sorprendente que el tema de la pobreza sea uno tan importante para alguien que vela por los derechos de las mujeres. Y es que la autonomía económica, el nivel educativo, la igualdad económica entre géneros y la oportunidad de progreso son algunos de los factores de protección de las mujeres, según la Organización Mundial de la Salud. Como consecuencia, la falta de estos elementos genera vulnerabilidad en las mujeres. Ante esto, Pagán expresó: “En la medida en que una trate de resolver ciertos problemas sociales solamente mirando los problemas psicosociales, por ejemplo, pues estamos dejando todo un componente que sabemos que tiene que estar presente, que es el económico. Podemos tener 50 albergues en la isla… pero sino desarrollamos económicamente a las mujeres vamos a necesitar 100”.
El perfil de las mujeres que utilizan los servicios de Matria corresponde al de las comunidades en desventaja de Puerto Rico. Su nivel educativo máximo es un diploma de escuela superior. Lo anterior se observa en los rezagos y la dificultad en escritura, lenguaje y matemática. Tampoco tienen acceso a servicios eficientes de educación, salud, y de tipo legal. En muchos casos tienen mal crédito, y no tienen capital propio, como vehículos y propiedades.
Es por ello que la directora de Matria quiso proponer un cambio, partiendo de los conceptos de economía y derechos humanos. Primeramente, sugirió cambiar el rol de consumidores que no producen sus bienes, ya que este patrón crea desigualdad y vulnerabilidad ante aquellos que manejan la producción. Dijo Pagán que una economía de desarrollo económico comunitario implica libertad y liderazgo.
La merienda sirvió de excusa perfecta para que micro-empresarias desarrolladas por Matria compartieran y mostraran sus deliciosos productos. Vimos cómo se puede salir adelante con ímpetu y solidaridad, comercializando un producto exquisito hecho por manos locales, como los deliciosos bizcochos.
5 de mayo de 2011
AMDEC te invita al Segundo Coloquio de Desarrollo Económico Comunitario
Visita el evento en facebook: http://www.facebook.com/?closeTheater=1#!/event.php?eid=198921580143388
25 de agosto de 2009
Cuando se gobierna para la desigualdad
Pinche para ver el Vídeo
Vean el vídeo en el que el Sr. Jaime González sobre el proyecto Riviera del Caribe para Roosevelt Roads en Ceiba...
16 de diciembre de 2008
En riesgo organizaciones comunitarias
Hacienda no les paga desde octubre.
Por Eliván Martínez Mercado / emartinez@elnuevodia.com
Publicada en El Nuevo Día, domingo, 14 de diciembre de 2008
Hay tensión estas Navidades en la organización de desarrollo comunitario PECES, en el pueblo de Humacao. Tendrá que interrumpir pronto los servicios educativos que ofrece a 110 desertores escolares, a 20 niños en un centro de cuido diurno y 40 microempresas, si el Departamento de Hacienda no le paga los $215,000 que le debe, y que en enero serán $430,000, indica José Oquendo, el director ejecutivo de la entidad.
Las cosas no pintan mejor en Nuestra Escuela. Esta organización sin fines de lucro brinda oportunidades educativas en Caguas, Vieques y Loíza a 250 jóvenes entre 13 y 21 años, que han sido desertores escolares, delincuentes y se han criado en familias rotas. Aquí intentan recuperar el camino. Pero la entidad se quedará sin fondos para trabajar si el Gobierno no paga los $900,000 que les debe, según el director ejecutivo, Justo Méndez.
Los servicios sociales, educativos y de salud de cientos de miles de personas alrededor del País están en juego. Hay 6,378 organizaciones sin fines de lucro en la Isla , según un informe de la firma de consultoría Estudios Técnicos Inc. Pero Hacienda les retiene los cheques a estas entidades desde octubre pasado por el déficit de caja. Estas organizaciones que hacen trabajo de interés social están entre el grupo de suplidores del Gobierno, a los que Hacienda no les ha desembolsado $503 millones. “No se sabe cuándo se pueda dar el dinero”, sostuvo a El Nuevo Día el secretario de Hacienda, Ángel Ortiz. “Todo depende de la disponibilidad de recaudo”.
Los servicios sociales, educativos y de salud de cientos de personas dependen de la labor de estas entidades sin fines de lucro.
La situación de PECES y Nuestra Escuela es similar a la que viven los Centros Sor Isolina Ferré, que anunciaron esta semana que iniciarán un plan para reducir la jornada laboral a 260 empleados, lo que indica que se afectarán servicios a 20,000 de sus participantes. El Gobierno les debe $3 millones.
“Estamos ante el riesgo de que en Puerto Rico entremos a una etapa de ingobernabilidad”, analiza Alfredo Carrasquillo, consultor de desarrollo y administración de las organizaciones sin fines de lucro. “El servicio que ofrecen evita emergencias y crisis sociales. Trabajan para prevenir y combatir la delincuencia, para ayudar a enfermos de salud mental, para proteger mujeres maltratadas que están en riesgo de muerte”.
Hacienda no tiene manera de determinar cuánto debe específicamente a las organizaciones sin fines de lucro, sostiene Ortiz, porque la ley no le obliga a hacer esa distinción de entre el grupo de suplidores.
La manera en que estas entidades acceden al dinero es haciendo propuestas al gobierno federal, a la Legislatura o agencias locales como los departamentos de Educación, Familia y Salud. El gobierno local y el federal separan partidas de sus presupuestos porque reconocen la importancia de las organizaciones, y algunos fondos se tienen que entregar por ley, como sucede con el Acta de Víctimas de Crímenes de Violencia, que entre otros aspectos ordena al Departamento de Justicia federal dar dinero a organizaciones que ayuden a víctimas de la violencia.
Entre el dinero que está reteniendo Hacienda hay fondos federales pagados por adelantado. Por eso la Procuradora de las Personas de Edad Avanzada, Rossana López León, anunció este viernes que ha radicado una demanda contra Hacienda, que debe $2,059,455 en fondos federales que se habían asignado a organizaciones sin fines de lucro que atienden a envejecientes.
La manera en que operan las organizaciones sin fines de lucro es toda una ordalía. Colectan un fondo general mediante actividades de recaudación de fondos, por ejemplo, o piden un préstamo a la banca, para tener un capital con el que dar los servicios. Luego reciben el dinero del Gobierno para recuperar gastos. Pero como ahora el Gobierno no les está pagando, no recuperan su fondo general y tienen problemas con los bancos, sostiene Amarilis Pagán, de la Alianza Multisectorial para el Desarrollo Económico Comunitario.
Otros datos:
* El 61.2% de las organizaciones sin fines de lucro recibe dinero del Gobierno, según Estudios Técnicos.
* En 2007 generaron 229,608 empleos directos, según Estudios Técnicos.
* Por cada dólar que el Gobierno transfiere a una organización sin fines de lucro para proveer cuidado de salud, tiene que invertir $7 para brindar el mismo servicio, por la burocracia y los convenios colectivos.
link: http://www.elnuevodia.com/XStatic/endi/template/content.aspx?se=nota&id=504518
Nota: Gracias a Celina Cuevas, compañera de Apoyo Empresarial Península de Canteras, quien logró el contacto inicial con el periodista.
Por Eliván Martínez Mercado / emartinez@elnuevodia.com
Publicada en El Nuevo Día, domingo, 14 de diciembre de 2008
Hay tensión estas Navidades en la organización de desarrollo comunitario PECES, en el pueblo de Humacao. Tendrá que interrumpir pronto los servicios educativos que ofrece a 110 desertores escolares, a 20 niños en un centro de cuido diurno y 40 microempresas, si el Departamento de Hacienda no le paga los $215,000 que le debe, y que en enero serán $430,000, indica José Oquendo, el director ejecutivo de la entidad.
Las cosas no pintan mejor en Nuestra Escuela. Esta organización sin fines de lucro brinda oportunidades educativas en Caguas, Vieques y Loíza a 250 jóvenes entre 13 y 21 años, que han sido desertores escolares, delincuentes y se han criado en familias rotas. Aquí intentan recuperar el camino. Pero la entidad se quedará sin fondos para trabajar si el Gobierno no paga los $900,000 que les debe, según el director ejecutivo, Justo Méndez.
Los servicios sociales, educativos y de salud de cientos de miles de personas alrededor del País están en juego. Hay 6,378 organizaciones sin fines de lucro en la Isla , según un informe de la firma de consultoría Estudios Técnicos Inc. Pero Hacienda les retiene los cheques a estas entidades desde octubre pasado por el déficit de caja. Estas organizaciones que hacen trabajo de interés social están entre el grupo de suplidores del Gobierno, a los que Hacienda no les ha desembolsado $503 millones. “No se sabe cuándo se pueda dar el dinero”, sostuvo a El Nuevo Día el secretario de Hacienda, Ángel Ortiz. “Todo depende de la disponibilidad de recaudo”.
Los servicios sociales, educativos y de salud de cientos de personas dependen de la labor de estas entidades sin fines de lucro.
La situación de PECES y Nuestra Escuela es similar a la que viven los Centros Sor Isolina Ferré, que anunciaron esta semana que iniciarán un plan para reducir la jornada laboral a 260 empleados, lo que indica que se afectarán servicios a 20,000 de sus participantes. El Gobierno les debe $3 millones.
“Estamos ante el riesgo de que en Puerto Rico entremos a una etapa de ingobernabilidad”, analiza Alfredo Carrasquillo, consultor de desarrollo y administración de las organizaciones sin fines de lucro. “El servicio que ofrecen evita emergencias y crisis sociales. Trabajan para prevenir y combatir la delincuencia, para ayudar a enfermos de salud mental, para proteger mujeres maltratadas que están en riesgo de muerte”.
Hacienda no tiene manera de determinar cuánto debe específicamente a las organizaciones sin fines de lucro, sostiene Ortiz, porque la ley no le obliga a hacer esa distinción de entre el grupo de suplidores.
La manera en que estas entidades acceden al dinero es haciendo propuestas al gobierno federal, a la Legislatura o agencias locales como los departamentos de Educación, Familia y Salud. El gobierno local y el federal separan partidas de sus presupuestos porque reconocen la importancia de las organizaciones, y algunos fondos se tienen que entregar por ley, como sucede con el Acta de Víctimas de Crímenes de Violencia, que entre otros aspectos ordena al Departamento de Justicia federal dar dinero a organizaciones que ayuden a víctimas de la violencia.
Entre el dinero que está reteniendo Hacienda hay fondos federales pagados por adelantado. Por eso la Procuradora de las Personas de Edad Avanzada, Rossana López León, anunció este viernes que ha radicado una demanda contra Hacienda, que debe $2,059,455 en fondos federales que se habían asignado a organizaciones sin fines de lucro que atienden a envejecientes.
La manera en que operan las organizaciones sin fines de lucro es toda una ordalía. Colectan un fondo general mediante actividades de recaudación de fondos, por ejemplo, o piden un préstamo a la banca, para tener un capital con el que dar los servicios. Luego reciben el dinero del Gobierno para recuperar gastos. Pero como ahora el Gobierno no les está pagando, no recuperan su fondo general y tienen problemas con los bancos, sostiene Amarilis Pagán, de la Alianza Multisectorial para el Desarrollo Económico Comunitario.
Otros datos:
* El 61.2% de las organizaciones sin fines de lucro recibe dinero del Gobierno, según Estudios Técnicos.
* En 2007 generaron 229,608 empleos directos, según Estudios Técnicos.
* Por cada dólar que el Gobierno transfiere a una organización sin fines de lucro para proveer cuidado de salud, tiene que invertir $7 para brindar el mismo servicio, por la burocracia y los convenios colectivos.
link: http://www.elnuevodia.com/XStatic/endi/template/content.aspx?se=nota&id=504518
Nota: Gracias a Celina Cuevas, compañera de Apoyo Empresarial Península de Canteras, quien logró el contacto inicial con el periodista.
9 de octubre de 2008
AMDEC coauspicia Encuentro por el Desarrollo Económico Comunitario
El pasado 19 de septiembre se celebró en Carolina el Encuentro por el Desarrollo Económico Comunitario. El mismo fue organizado por AMDEC y el Comité de Reinversión Comunitaria de la Asociación de Bancos de Puerto Rico. Ese día, líderes comunitarios de toda la Isla se dieron cita en la actividad que giró en torno al tema de la autosustentabilidad de las organizaciones. Se ofrecieron, además, talleres concurrentes sobre incubación de microempresas comunitarias, microcrédito, mercadeo de productos comunitarios y la utilización efectiva de los medios.
A continuación incluimos el mensaje de bienvenida ofrecido a la concurrencia por la Lcda. Amárilis Pagán Jiménez, directora ejecutiva de Proyecto Matria y presidenta de AMDEC:
Buenos días a todas y a todos.
Hace apenas tres o cuatro generaciones atrás, mi familia- y las familias de muchas otras puertorriqueñas y puertorriqueños- vivía sumida en la esclavitud gracias a una vergonzosa práctica económica que les negaba su derecho a la libertad, a la vida y a la equidad. Los que se beneficiaban de la esclavitud alegaban que hacían un favor a las personas negras pues les proveían alimentos y techo. Hoy, estoy yo aquí, ante ustedes, dándoles la bienvenida a este encuentro y no tengo nada que agradecer a los esclavistas. Ni siquiera mi apellido.
Y ustedes se preguntarán qué tiene que ver esto que les cuento con este Encuentro por el Desarrollo Económico Comunitario. Pues mucho. En cuatro generaciones- lo que implica un simple pestañeo de la historia pero muchos eventos vividos en una familia- muchas familias de nuestro país pasaron por lo mismo que la mía. Pasaron por cosas como las que pasó una de mis abuelas: Criar nueve hijos e hijas, viuda y sin ningún tipo de apoyo económico. Vivió las consecuencias de no tener acceso a servicios legales, servicios de salud, educativos- sólo pudo estudiar hasta sexto grado a pesar de ser una mujer inteligente que le garantizaran una vida digna. Ella y sus hijos pasaron hambre. Lo triste de esto es que todavía hoy en día muchas otras mujeres, hombres y niños pasan hambre y privación en nuestra Isla.
No puedo decir que el sacrificio de mi familia fue lo único que logró darme la oportunidad de estar ante ustedes hoy. Si el mero sacrificio personal fuera capaz de levantar a las familias de la pobreza, en nuestro país no habría gente pobre. Si yo aceptara que ese sacrificio de la propia gente pobre y excluida es la única solución a la pobreza, estaría culpando de su estado a nuestras comunidades excluidas. Estoy segura, de que muchas mujeres de la generación de mi abuela se sacrificaron igual y sin embargo sus hijas y nietas no están aquí. Están en cárceles, en comunidades excluidas, tal vez enfermas o siendo víctimas de la violencia.
Y ahora les voy a explicar cómo todo esto se relaciona con este Encuentro. Estando plenamente consciente de que la pobreza es hija de la desigualdad les digo que para eliminar las barreras y exclusiones que generan pobreza en Puerto Rico y en el resto del planeta, todo grupo social debe asumir responsabilidad. De eso trata este Encuentro. Toda persona, debe comprometerse a actuar y a deconstruir las premisas de discrimen que muchas veces le impiden apoyar efectivamente los esfuerzos de nuestras comunidades excluidas. No se trata de hacer un favor o dar las migajas que se caen de la mesa a la gente pobre y excluida. Eso se lo dejamos a los esclavistas del siglo XIX.
Quien hoy en día se atreva a decirnos que está trabajando en contra de la pobreza, tiene que demostrarlo con hechos significativos. Aún cuando la pobreza se deriva de la desigualdad, no deja de ser un asunto económico que necesita soluciones económicas. Quien hoy aquí se sienta invitado a trabajar por la equidad social y económica, debe plantearse cuánto está dispuesto a invertir en las comunidades. Y de eso precisamente también se trata este Encuentro.
La riqueza de este Encuentro por el Desarrollo Económico Comunitario estriba en la capacidad que tiene de convertirse en un espacio de convergencia para quienes aman a nuestro país, quienes tienen el empuje y la energía para trabajar por él, quienes tienen el conocimiento y la voluntad, quienes tienen el poder y no temen compartirlo y quienes tienen los recursos económicos y están dispuestos a invertirlos.
Hoy, recursos voluntarios de nuestras organizaciones y entidades estarán ofreciendo talleres de capacitación para que nos podamos llevar herramientas de trabajo a nuestras comunidades y multipliquemos las iniciativas de microempresarismo comunitario. A la misma vez, el Comité de Reinversión Comunitaria de la Asociación de Bancos invirtió energía y recursos para organizar este Encuentro. Los tiempos que vivimos nos obligan a mirar nuestro entorno con otros ojos y a reconocer en cada grupo de los que componen nuestra Alianza Multisectorial un aliado importante.
¿Queremos justicia económica? Sí. ¿Queremos equidad? Sí. Queremos un país de todas y todos y les exhorto que hoy aprovechemos al máximo este espacio común y nos reafirmemos en nuestro compromiso con las acciones necesarias para que esto se logre. ¡Buenos días!
A continuación incluimos el mensaje de bienvenida ofrecido a la concurrencia por la Lcda. Amárilis Pagán Jiménez, directora ejecutiva de Proyecto Matria y presidenta de AMDEC:
Buenos días a todas y a todos.
Hace apenas tres o cuatro generaciones atrás, mi familia- y las familias de muchas otras puertorriqueñas y puertorriqueños- vivía sumida en la esclavitud gracias a una vergonzosa práctica económica que les negaba su derecho a la libertad, a la vida y a la equidad. Los que se beneficiaban de la esclavitud alegaban que hacían un favor a las personas negras pues les proveían alimentos y techo. Hoy, estoy yo aquí, ante ustedes, dándoles la bienvenida a este encuentro y no tengo nada que agradecer a los esclavistas. Ni siquiera mi apellido.
Y ustedes se preguntarán qué tiene que ver esto que les cuento con este Encuentro por el Desarrollo Económico Comunitario. Pues mucho. En cuatro generaciones- lo que implica un simple pestañeo de la historia pero muchos eventos vividos en una familia- muchas familias de nuestro país pasaron por lo mismo que la mía. Pasaron por cosas como las que pasó una de mis abuelas: Criar nueve hijos e hijas, viuda y sin ningún tipo de apoyo económico. Vivió las consecuencias de no tener acceso a servicios legales, servicios de salud, educativos- sólo pudo estudiar hasta sexto grado a pesar de ser una mujer inteligente que le garantizaran una vida digna. Ella y sus hijos pasaron hambre. Lo triste de esto es que todavía hoy en día muchas otras mujeres, hombres y niños pasan hambre y privación en nuestra Isla.
No puedo decir que el sacrificio de mi familia fue lo único que logró darme la oportunidad de estar ante ustedes hoy. Si el mero sacrificio personal fuera capaz de levantar a las familias de la pobreza, en nuestro país no habría gente pobre. Si yo aceptara que ese sacrificio de la propia gente pobre y excluida es la única solución a la pobreza, estaría culpando de su estado a nuestras comunidades excluidas. Estoy segura, de que muchas mujeres de la generación de mi abuela se sacrificaron igual y sin embargo sus hijas y nietas no están aquí. Están en cárceles, en comunidades excluidas, tal vez enfermas o siendo víctimas de la violencia.
Y ahora les voy a explicar cómo todo esto se relaciona con este Encuentro. Estando plenamente consciente de que la pobreza es hija de la desigualdad les digo que para eliminar las barreras y exclusiones que generan pobreza en Puerto Rico y en el resto del planeta, todo grupo social debe asumir responsabilidad. De eso trata este Encuentro. Toda persona, debe comprometerse a actuar y a deconstruir las premisas de discrimen que muchas veces le impiden apoyar efectivamente los esfuerzos de nuestras comunidades excluidas. No se trata de hacer un favor o dar las migajas que se caen de la mesa a la gente pobre y excluida. Eso se lo dejamos a los esclavistas del siglo XIX.
Quien hoy en día se atreva a decirnos que está trabajando en contra de la pobreza, tiene que demostrarlo con hechos significativos. Aún cuando la pobreza se deriva de la desigualdad, no deja de ser un asunto económico que necesita soluciones económicas. Quien hoy aquí se sienta invitado a trabajar por la equidad social y económica, debe plantearse cuánto está dispuesto a invertir en las comunidades. Y de eso precisamente también se trata este Encuentro.
La riqueza de este Encuentro por el Desarrollo Económico Comunitario estriba en la capacidad que tiene de convertirse en un espacio de convergencia para quienes aman a nuestro país, quienes tienen el empuje y la energía para trabajar por él, quienes tienen el conocimiento y la voluntad, quienes tienen el poder y no temen compartirlo y quienes tienen los recursos económicos y están dispuestos a invertirlos.
Hoy, recursos voluntarios de nuestras organizaciones y entidades estarán ofreciendo talleres de capacitación para que nos podamos llevar herramientas de trabajo a nuestras comunidades y multipliquemos las iniciativas de microempresarismo comunitario. A la misma vez, el Comité de Reinversión Comunitaria de la Asociación de Bancos invirtió energía y recursos para organizar este Encuentro. Los tiempos que vivimos nos obligan a mirar nuestro entorno con otros ojos y a reconocer en cada grupo de los que componen nuestra Alianza Multisectorial un aliado importante.
¿Queremos justicia económica? Sí. ¿Queremos equidad? Sí. Queremos un país de todas y todos y les exhorto que hoy aprovechemos al máximo este espacio común y nos reafirmemos en nuestro compromiso con las acciones necesarias para que esto se logre. ¡Buenos días!
13 de abril de 2008
Comunicado de prensa
Alianza Multisectorial por el Desarrollo Económico Comunitario
solicita inclusión de concepto de desarrollo socioeconómico en la nueva Ley de Incentivos
solicita inclusión de concepto de desarrollo socioeconómico en la nueva Ley de Incentivos
A: Medios de comunicación
De: Alianza Multisectorial por el Desarrollo Económico Comunitario
Persona Contacto: Lcda. Amárilis Pagán Jiménez (Tels. 787-703-0148 y cel. (787) 486-6432) y Pedro Santiago (Tel. 787-646-9011)
San Juan, Puerto Rico, domingo, 13 de abril de 2008- “Un crecimiento económico sin generación de empleos dignos y sin contar con los elementos de desarrollo sostenible no solucionará la crisis económica y de desigualdad que enfrenta Puerto Rico”. Con esa premisa como norte, líderes de la Alianza Multisectorial por el Desarrollo Económico Comunitario (AMDEC) reclamaron participación en el Comité Timón a cargo de redactar la nueva Ley de Incentivos y comparecieron el pasado viernes ante el Comité Técnico que apoya los trabajos del mismo.
Según explicaron a los medios, su presentación incluyó un total de 12 propuestas dirigidas a fortalecer el sector de empresas comunitarias el cual se compone principalmente de microempresas estructuradas como cooperativas, corporaciones de trabajadores, DBAs e iniciativas de autoempleo. También proponen que se apoyen las organizaciones que incuban este tipo de empresas y que al día de hoy son el principal apoyo en la Isla para el desarrollo económico comunitario (DEC).
Pedro Santiago, integrante de la junta de AMDEC y director de la Red de Apoyo a Grupos Comunitarios en Desarrollo Socioeconómico destacó que “la realidad de Puerto Rico nos obliga a establecer un nuevo paradigma de desarrollo sostenible en el cual se dé relevancia a la eliminación de las desigualdades que provocan la pobreza y la exclusión de sectores importantes de nuestra sociedad”. Según éste, el modelo económico tradicional demostró ser ineficaz para enfrentar los retos del Puerto Rico del Siglo XXI y fragmentó los esfuerzos de desarrollo haciendo que el desarrollo sostenible pareciera incompatible con el desarrollo económico y al crear la apariencia de que el crecimiento económico es un fin en sí mismo.
A su vez la Lcda. Amárilis Pagán Jiménez, presidenta de AMDEC y directora de Proyecto Matria, indicó que las tres propuestas básicas de la organización son:
1. Que la ley considere no sólo el aspecto económico sino que tenga también lenguaje y contenido que contemple la justicia social.
2. Que la ley tenga un enfoque de desarrollo sostenible.
3. Que la ley sea inclusiva y no exclusiva en cuanto a los sectores de producción económica.
De dichas propuestas básicas se derivan las doce que incluyen, entre otras, las siguientes:
1. Definir el área de Desarrollo Económico Comunitario dentro de la política pública de la nueva ley como un pilar importante para la economía del país y que a la luz de esta política pública se elabore una estrategia inclusiva y pertinente que atienda las necesidades reales de dicho sector tomando en cuenta que el mismo representa emprendimientos sociales exitosos como cooperativas, empresas propiedad de trabajadores, micro-emprendimientos, la pequeña y mediana empresa, entre otras iniciativas que aportan abundantemente a nuestra economía.
2. Crear una certificación que permita a los/as empresarios/as comunitarios/as y organizaciones sin fines de lucro de base comunitaria que promueven y tienen como una de sus prioridades el desarrollo económico comunitario, disfrutar de un paquete de incentivos que les permita acceder a ciertos beneficios como los que se enumeran más adelante.
a. La renta de edificios a través de Fomento Industrial para la creación de Incubadoras de Microempresas y Empresas Comunitarias y la asignación de instalaciones industriales a organizaciones sin fines de lucro, de base comunitaria (según definición que someta el sector comunitario), que demuestren capacidad y compromiso en establecer incubadoras de microempresas y empresas comunitarias
b. Créditos o incentivos para la utilización de fuentes de energía alternas en microempresas y empresas comunitarias.
c. Participación en procesos de subastas, licitaciones u otros instrumentos del Estado
3. Revisar las definiciones y tipos de empresas que se incluyan en la ley para que las empresas comunitarias de distintos niveles puedan cualificar para los incentivos. (En la Ley actual las definiciones, límites de empleados/as y de ingresos excluyen a estas empresas)
4. Eliminar o reducir el porcentaje de exportaciones que debe tener una empresa/industria para cualificar para los incentivos. No toda empresa capaz de producir empleos y crecimiento económico en la Isla exporta.
5. De insistirse en la creación de una Junta de Regentes, incluir en ésta una silla para un/a representante del sector económico comunitario en su definición amplia (empresarios/as y organizaciones de promoción y desarrollo del sector)
6. Crear mecanismos de pago rápido a empresas comunitarias y organizaciones sin fines de lucro que ofrecen servicios vitales para el país estableciendo una línea de crédito con cero (0) intereses en el Banco de Desarrollo para aquellas OSFL que ofrezcan servicios al gobierno
7. Promover la contratación de empresas comunitarias con o sin fines de lucro requiriendo a otras industrias que se benefician de incentivos gubernamentales que mantengan un porcentaje de sus contratos con empresas comunitarias y revisar el cumplimiento de este requisito mediante la solicitud de informes al respecto como parte de un proceso de recertificación.
Luis Valderrama de Comité de Caborrojeños Pro Salud y Ambiente agregó que es importante que se cree la infraestructura adecuada (inmuebles, energía renovable, procesos de permisos, recursos humanos y distribución) para atraer no sólo al inversionista extranjero sino al local. “Hay estudios que demuestran que la infraestructura y el estar cerca de su cadena de proveedores y clientes, son las principales razones para invertir en un país”. concluyó.
La Alianza Multisectorial por el Desarrollo Económico Comunitario agrupa sobre 25 organizaciones sin fines de lucro, entidades privadas y agencias gubernamentales entre las que están PECES, Inc. la Red de Apoyo a Grupos Comunitarios en Desarrollo Socioeconómico, Proyecto Matria, Inc., OPDH y Caborrojeños Pro Salud y Ambiente. Colaboraron en esta iniciativa además, Cumbre Social y la Corporación para el Desarrollo del Caño Martín Peña.
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